Los objetos que se mantienen en un entorno de Kubernetes son entidades persistentes que representan la configuración del clúster. Estos objetos describen de manera colectiva el estado del sistema, incluida la carga de trabajo del clúster.

Los espacios de nombres proporcionan una técnica para aislar recursos dentro de un único clúster. Esta estructura organizativa es útil cuando se dividen los tipos de trabajo, los usuarios y los recursos. Los objetos con un Namespace Scope deben ser únicos dentro del espacio de nombres, mientras que los que tienen un cluster scope deben ser únicos en todo el clúster.

Las etiquetas pueden asociarse con los objetos de Kubernetes. Describen los atributos mediante pares de clave-valor y pueden aplicar una organización arbitraria en el clúster que puede ser útil para una organización pero que se encuentra fuera del funcionamiento de Kubernetes principal.